Científicos rusos han descubierto sangre y tejidos musculares perfectamente bien conservados entre
los restos de un mamut lanudo enterrado bajo el hielo en la pequeña
isla Liajovski, en la costa del noreste de Rusia. El hallazgo supone un
paso importante en la realización de un experimento sin precedentes, la
clonación y el regreso a la vida de esta especie que desapareció de la
faz de la Tierra hace cerca de 10.000 años.